Al menos cinco
personas murieron y unas doce resultaron heridas en la ciudad
colombiana de Barranquilla por riñas ocurridas la noche del
miércoles tras la derrota del Atlético Junior en la final de
la Liga local ante el Atlético Nacional.
Entre las víctimas está un menor de edad que murió como consecuencia de un balazo en la cabeza, mientras que otras tres personas fueron atacadas con arma blanca y una quinta que también falleció por un impacto de bala.
"Es un hecho lamentable, al que hay que ponerle toda la atención", manifestó hoy a periodistas el comandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla, brigadier general José Vicente Segura, al referirse al caso del menor de edad.
El Atlético Junior jugó anoche en Medellín con Atlético Nacional el partido de vuelta de la final de la liga colombiana, título que se definió en favor del equipo anfitrión por 4-2 en lanzamientos desde el punto penalti.
La derrota del Junior causó también disturbios en los municipios de Soledad, Malambo y Galapa, cercanos de Barranquilla, donde resultaron heridos cinco policías que intentaban controlar las riñas.
"Los patrulleros y agentes presentan heridas en la cabeza, piernas y hombro. Todos los casos se presentaron en lugares diferentes cuando se estaba retomando el control por los desórdenes", informó la fuente policial.
En Bogotá también
se presentó un incidente en el que un funcionario del Cuerpo
Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía que se encontraba
ebrio fue detenido por la Policía por hacer disparos al aire para
celebrar el título de Nacional.
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